Con un impulso de emergencia de los fondos federales que se agotará para fin de año, el sistema de metro de DC, que según se informa está perdiendo millones de dólares al día, está comenzando a planificar importantes medidas de ahorro de costos, incluido el corte de ferrocarril y servicio de bus el año que viene.
El gerente general de Metro, Paul Wiedefeld, ha advertido durante meses que la agencia enfrenta una “crisis inminente” sin más fondos federales.
Pero una reunión de la Junta Directiva de Metro hace una semana brindó el primer vistazo a los posibles recortes en el servicio, luego de discutir el establecimiento del cronograma, o agenda, para una serie de audiencias públicas sobre reducciones de servicio, según Matt Letorneau, miembro de la Junta de Metro, de Loudoun. Condado de Virginia.
Letorneau, que es uno de los ocho miembros de la junta de Metro, dijo que anticipa “discusiones difíciles” en el futuro.
“Estamos en un punto en el que, a menos que llegue nuevo dinero federal, no hay forma de evitar un dolor significativo”, dijo.
La reunión de la Junta de Metro sobre posibles reducciones en el servicio se produjo solo tres semanas después de que la agencia de tránsito restauró el servicio en los rieles a niveles cercanos a la pandemia, gracias a $ 876 millones en dinero federal a través del enorme proyecto de ley de alivio del coronavirus conocido como la Ley CARES.
Sin embargo, las conversaciones en Capitol Hill sobre una nueva ronda de fondos para el alivio del coronavirus, que los funcionarios de Metro dicen que es necesaria, parecen haberse estancado.
Sin dinero federal adicional, Metro necesita hacer cambios significativos, dijo Letorneau.
“Esencialmente, sin cambios o más dinero federal, WMATA tendrá dificultades para seguir ejecutando el sistema, pagar nóminas y hacer todo ese tipo de cosas”, dijo Letorneau. “Por eso, la Junta de Metro está ahora trabajando en algunos cambios significativos para ahorrar costos”.
Maryland, D.C. y Virginia proporcionan fondos adicionales dedicados al sistema, pero cada jurisdicción ahora está lidiando con la posibilidad de sus propios déficits presupuestarios debido al impacto económico de la pandemia del coronavirus.
“Existe un entendimiento en la Junta de Metro de que no necesariamente más dinero proviene de las jurisdicciones en el año fiscal 2021 para abordar esto”, dijo Letorneau. “Y eso significa que la única forma de rectificar realmente este problema será reducir el servicio y reducir los costos”.
Ninguno de los cambios que están contemplando los funcionarios de Metro necesariamente entraría en vigencia de inmediato. Hay un extenso período de comentarios públicos antes de que Metro pueda promulgar reducciones de servicio o cambiar horarios.
“Pero este es el camino en el que debemos estar para llegar a estos cambios antes de fin de año”, agregó Letorneau.
Además, dijo, hay discusiones en curso con el sindicato que representa a los empleados de Metro.
“Creo que es justo decir que esas discusiones entre Metro y el presidente del sindicato han sido productivas y, en este momento, existe un entendimiento mutuo de la situación”, dijo.
Mientras tanto, los funcionarios de Metro continúan presionando para obtener más ayuda federal, dijo Letorneau. “El gobierno federal puede cambiar de marcha, y esperamos que lo haga en algún momento”, dijo, y agregó que la planificación seguirá siendo flexible en caso de que finalmente se llegue a un acuerdo sobre alivio adicional del coronavirus.
“Si tenemos una situación financiera diferente en algún momento durante ese proceso, digamos, después de las elecciones, Metro tendría la capacidad de adaptarse”, dijo.
Los pasajeros no han regresado
La gran cantidad de dinero federal a través de la Ley CARES fue un salvavidas para Metro, lo que permitió a la agencia presionar a muchos empleados, que habían estado inactivos, para que volvieran al servicio, dijo Letorneau.
Pero incluso con el servicio restaurado a niveles cercanos a la pandemia, Metro no ha visto una afluencia de pasajeros que regresen al sistema.
Letorneau dijo que el sistema ha visto solo un “pequeño aumento incremental” desde mediados de agosto, cuando Metro volvió a un horario casi normal. “No es una gran recuperación”, agregó.
Los funcionarios de la agencia de tránsito esperaban ver más pasajeros regresar cuando los empleados federales comenzaran a regresar a sus oficinas, dijo Letorneau.
“Francamente, el gran problema para nuestro sistema de Metro es el gobierno federal … Y creo que es justo decir que esperábamos que regresara más pasajeros cuando el gobierno federal comenzó a retirar empleados de lo que ha sido el caso”, dijo.
Hay incluso noticias potencialmente peores en Metrobus, donde el número de pasajeros se había mantenido estable durante los últimos meses.
Metro impulsó el servicio de autobuses a partir del 23 de agosto.
Ahora, sin embargo, la agencia de tránsito ahora está viendo una cierta reducción en el número de pasajeros de autobuses, dijo Letorneau.
“Desafortunadamente, la teoría de trabajo al respecto es que algunas de las personas que confiaban en (Metrobus) pueden haber perdido sus trabajos, y con esa reducción de empleo ahora, en realidad estamos viendo algo de suavización en ciertas rutas del sistema de autobuses”. él dijo.
Incluso con el aumento en el servicio de autobús, los pasajeros de Metrobus continúan subiendo desde la parte trasera del autobús y obteniendo un pase para pagar la tarifa de $ 2.
Compartiendo lo que llamó su opinión personal, Letourneau dijo que le gustaría ver a los pasajeros de autobús pagando las tarifas “lo antes posible, no solo por razones de ingresos, sino también porque creo que envía un mensaje al público de que es seguro viajar en autobús”. ; es seguro viajar en transporte público “.
La desconfianza del pasajero es un gran problema
Al mismo tiempo que los funcionarios están planeando para el peor de los casos, también están tratando de atraer a los pasajeros que han ocultado el sistema en medio de preguntas sobre la seguridad del transporte público cuando se trata de la propagación del coronavirus.
“Mucha gente simplemente tiene miedo de usar el transporte público donde hay mucha gente, y creo que ese será uno de nuestros obstáculos”, dijo el senador estatal de Virginia John Bell, quien también forma parte de la comisión de transporte.
Letorneau admitió que “la confianza de los pasajeros es un gran problema”, pero señaló los hallazgos de encuestas recientes que indican que hay poca evidencia de que el transporte público represente un riesgo significativo de sembrar brotes de COVID-19.
Dijo que Metro está planeando una campaña de concientización pública este otoño para tratar de tranquilizar a los pasajeros y resaltar las precauciones que está tomando Metro, incluida una limpieza intensificada.
La Comisión de Transporte del Norte de Virginia también discutió una instantánea de cuán severamente la pandemia de coronavirus golpeó el transporte público en los suburbios de DC en su reunión del 3 de septiembre.
Traducido por Luis R Castellanos de publicación en WTOP
